Handsome Girl (en versión original Handsome na Kanojo) es un manga de Wataru Yoshizumi publicado en la revista Ribon de 1988 a 1991 (ahí es nada) y recopilado en 9 tomos. Tras el éxito de su serie posterior Marmalade Boy, lanzaron una edición bunko de Handsome Girl de mayor tamaño y que reduce el número de tomos a 5 (esta es la que han publicado en España) Aunque fuese de sus primeras obras, ya tuvo cierto nivel de popularidad, ya que la adaptaron a un OVA largo e incluso se habló de transformarla en una película live-action... pero, ¿merece la pena leerla hoy día o ha envejecido peor que Shugo Chara?
Sinopsis
Mio Hagiwara sólo tiene 14 años pero ya trabaja como actriz en varios doramas. A pesar de ser relativamente famosilla e ir a una escuela para artistas en la que les dejan ir a su bola en lo que a estudios se refiere, a Mio no le importa ser una segundona y la eterna enemiga en pantalla (pero amiga en la vida real) de la popular idol Aya Sawaki. Es más, lo que más le importa es ser una chica normal y tirarle los trastos a su amigo de la infancia Teru-chan. Pero todo eso cambia cuando en un rodaje conoce a Ichiya Kumagai, un chaval de 15 años que acaba de volver de EEUU y que sueña con convertirse en director de cine. Aunque al principio a Mio le parece un estirado, su opinión de él cambia cuando lo ve dirigir y decide aceptar su propuesta de ser la protagonista de su primera película, sin saber que Ichiya volvió a Japón con el único propósito de conocerla. ¿Qué será de ellos dos en el mundo de la farándula y con la atmósfera shojo que alborota aún más las hormonas adolescentes?
Personajes
Mio: la protagonista. Mio es en apariencia todo lo contrario a la protagonista del siguiente manga de la Yoshizumi (Miki de Marmalade Boy), una chica rubia de pelo largo que es más bien reservada y too cool for you, no por nada es la handsome girl a la que se refiere el título: una actriz que se enmarca más en papeles que no son ni femme fatale ni damisela en apuros. El problema es que... apenas vemos cómo actúa Mio en los rodajes, y en la vida real Mio no tiene mucho de aquella chica guay que interpreta en sus películas: no es más que una adolescente llorona y enamoradiza como tantas otras en los mangas shojo. Una prota que aprueba por los pelos porque no es tan molesta ni pasiva como otras, pero que tampoco se hace destacar.
Ichiya: el maromo de turno. Aunque tiene la misma edad que Mio, es un genio como director y ha estado varios años estudiando en Estados Unidos bajo el mando del famoso director Arthur Clayton (básicamente un plagio de Spielberg que parece el JoJo ese cuando es viejo y lleva barba) Regresa de repente a Japón para dirigir su primera película en solitario y, aunque critica la manera de actuar de Mio en un principio, en realidad anda colgado de ella desde que la vio en un dorama. Ichiya es un personaje bastante raro. Respira. Existe. Está ahí para darle un novio a Mio y algo de movimiento al asunto. Más que un personaje en sí, me resultó un medio de crear drama, ya sea porque sus amigos se cuelgan de Mio, porque él se va y ella se pone triste, porque el tal Clayton la contrata y él se pone celoso... No sé, a ratos se me olvidaba incluso que existía. Así de mediocre es. Al menos de Mio te acuerdas, aunque sean porque está en boca de todos todo el día.
Aya: la mejor amiga de Mio, suele ser la protagonista y rival en los doramas en los que actúan juntas aunque en la vida real no se pelean ni a patadas. Es más idol que actriz y sobre todo sirve en la trama para quitarse de en medio al tal Teru-chan, del que ella también está enamorada y con quien termina saliendo (perdonad el spoiler pero ya sabéis que en estos mangas todo quisqui tiene que acabar con pareja) Una vez que resuelve el problema con su chorbo se convierte en el paño de lágrimas particular de Mio y poco más. Ese es el triste destino de las mejores amigas en los shojos: no llegan ni a segundo plano de lo que pasan de ellas en cuanto dejan de implicar salseo.
Osamu: un amigo de Ichiya que trabaja con él en su película pero que también quiere ser director en solitario, Osamu vino desde Osaka para colaborar con él pero una vez que se ve en Tokyo decide que su objetivo del mes es beneficiarse a Mio. Así, de forma gratuita. Y lo gracioso es que la Yoshizumi recurre con él al mismo recurso que luego repite en Chitose etc.: como Ichiya es duro de mollera y no se declara a Mio de buenas a primeras, ¿qué mejor que convencerla de que salga con él para darle celos a Ichiya y así de paso llevársela al catre? La cosa al menos termina antes que en Chitose etc., lo cual se agradece, pero eso no quita que se te quede el regustillo del arco del "jiji démosle celos" cada vez que asoma la cabeza durante el resto del manga.
Opinión personal
Pues nada, ya me he leído otra serie de antes de que yo naciera. Si escogí yo leer esta serie en vez de otra más reciente de la autora (aparte de que Eva ya había empezado a leer Chitose etc. por aquel entonces) fue porque a) me negaba a releer otra vez Marmalade Boy y b) es la otra serie larga de la Yoshizumi que ha traído Planeta.
Pues... no ha cambiado tanto la mujer, oye. Aun siendo su primera serie larga, se nota que de aquí sacará todos los tópicos que le servirán durante el resto de su carrera. Aunque admito que tengo que darle un poco de cancha: en las notas de la autora en los márgenes, explica que los de la Ribon le obligaron a alargar el manga dos veces: la primera, porque se planeó un proyecto de película live-action y debía continuarlo para promocionarlo (aunque más tarde este proyecto se canceló) y la segunda, porque lanzaron un OVA adaptando los primeros tomos pero les parecía raro que lo fueran a sacar estando la serie ya terminada y le forzaron a inventarse más trama hasta que estuviera en venta. Y oye, se nota.
Durante los primeros 3 o 4 tomos, Handsome Girl es un shojo normalito, con sus líos de amoríos y adolescencia hormonada, el dibujo anticuado de la Yoshizumi y una cantidad considerable de azúcar. Luego viene el relleno y ya, tal. Time-skip al canto, la Yoshizumi que no sabe cómo alargar la trama ni aunque le vaya la vida en ello y tú que sigues leyendo para poder tener la serie como completada en MAL. A mí, al final la serie me supo como un chicle: cuando lo empiezas a mascar está bueno y no te molesta tenerlo en la boca, pero al cabo de un rato empieza a perder el sabor y te desesperas porque quieres tirarlo y no encuentras papelera. Handsome Girl es ese chicle. Con envoltorio doki-doki y de ojos grandes.
¿Mi veredicto? La Yoshizumi ha sido moñas desde siempre, vendiendo los mismos clichés una y otra vez, pero oye, me alegro de que le vaya bien. Aunque yo en el fondo sigo queriendo que repita y haga algo como Spicy Pink, pero que no se la cancelen esta vez...
Y recordad niños, apoyad a Planeta que al menos trae shojo mejor que el de Ivrea y encima Handsome Girl la traen en edición bunko, que parecen menos tomos y el trago se hace menos largo. ¡A seguir disfrutando del verano maromil, aunque nos quede poco!
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