¡Buenas y bienvenidos a mi primera crítica de shojo en Bleu Orchidée! En esta ocasión os traigo Tsuki no Shippo (literalmente “La cola de la luna”, haceos una idea de la calidad de esta serie) de Rinko Ueda, publicada originalmente en la revista bimensual Margaret y luego lanzada en 15 tomos entre 2003 y 2007. ¿Qué podemos esperar de una serie que logró ser publicada tanto tiempo?
Antes de nada, quiero comentaros algo sobre la industria del shojo: normalmente, muchas autoras se pasan al josei una vez que se hacen mayores, pues ser una señora de 40 o 50 años publicando series sobre niñas de instituto es bastante triste (ahí tenemos a Aya Nakahara con DameKoi, Wataru Yoshizumi con Marmalade Boy little, Arina Tanemura con 31 Ai Dream…) Pues bien, la señora Ueda pegó este salto en 2012, no sin antes dejarnos dos últimas perlas: Tsuki no Shippo y Hadashi de Bara wo Fume, que más que mangas del siglo 21 parecen reliquias de los años 80. Unas joyitas. Pero por esta ocasión, centrémonos en Tsuki no Shippo:
Sinopsis
Estamos en la era Tensho del período Momoyama (finales del siglo XVI) en Japón, época de guerreros tan conocidos como Nobunaga Oda y Akechi Mitsuhide… Y también de ninjas. Usagi, nuestra protagonista de turno, pertenece a un clan ninja y es el hazmerreír del pueblo: tonta, torpe y absolutamente incapaz de hacer algo útil. Como último recurso al verla incapaz de conseguir su título de ninja oficial, su abuelo decide casarla con el líder de la aldea vecina, Hanzo Hattori, y que sea la madre de sus hijos. Usagi se ve obligada a dejar la aldea acompañada de su hermano adoptado/esclavo Mamezou, y cuando conoce a Hanzo y ve lo estirado que es decide que nunca, nunca será su esposa… Pero siendo un shojo, veis cómo va a terminar esto, ¿no? Y mejor me lo pones cuando metes al amigo de la infancia de Usagi, a una chica mucho más guapa que ella y al primo ligón de Hanzo en la mezcla...
Para meterle más chicha, Usagi y Hanzo se ven envueltos en todo tipo de enredos y tramas políticas después de su rápido enamoramiento, que impiden que consumen su matrimonio como es debido. ¿Podrán superar todos los obstáculos y hacer muchos churumbeles para que el líder de la aldea de Usagi por fin pueda presumir de nietos?
Personajes:
Usagi: Nuestra protagonista. Una chica de 15 años torpe pero jovial que sobrevive como puede a sus clases de ninja aunque no pase del nivel infantil por su torpeza y su incapacidad de darse cuenta de lo que le rodea (para haceros una idea, lleva el pelo corto porque una vaca se comió su coleta sin darse ella cuenta) . Una vez se traslada a Iga, su vida empieza a girar alrededor de Hanzo, y es de lo único que habla. Su única cualidad redentora es su conocimiento de hierbas medicinales con las que intenta contrarrestar los efectos de los venenos que tomó cuando era pequeña. Sí, al menos puede luchar contra la selección natural.
Hanzo: El principal interés amoroso de Usagi, Hanzo es el ninja perfecto: atlético, más serio que bala y con ningún otro interés más que proteger Iga. Su personalidad es más cambiante que la luna: empieza siendo arisco, luego se convierte en amorosísimo pero no tarda en pasar de nuevo a ser un maleducado… todo esto cuando aparece, porque la autora siempre busca alguna excusa para quitarlo de en medio durante algunos capítulos y que Usagi lloriquee hasta que vuelva. En definitiva, el típico protagonista "soy un agrio pero como soy guapo da igual".
Mamezo: Un niño huérfano que Usagi se encontró en mitad del bosque cuando era un bebé y que decidió adoptar como hermano, aunque más bien termina siendo una fusión entre esclavo que evita que Usagi muera cada cinco minutos y voz de la razón en cuerpo prepúber. Posiblemente el mejor personaje de la serie.
Completan el elenco todo tipo de secundarios que no me voy a molestar en describir porque los conocéis de sobra: el rival casanova que se rinde a la primera de cambio, el amigo de la infancia pagafantas, la rival más guapa que la prota que luego se hace amiga porque sí, la amiga de la infancia desaparecida que aparece por arte de magia por conveniencias del guión… Un despliegue de originalidad, vamos.
Opinión personal
Vamos a ver, soy consciente de que es muy difícil mantener la calidad de un manga durante 15 tomos, y admito que durante los pocos capítulos en los que Usagi fue útil y metieron componente histórico logré hasta engancharme. Pero eso es todo. Usagi es una prota del montón: genérica, llorona y un lastre para el resto de personajes. Hanzo no pasa de ser un estoico que de un momento a otro pasa de odiar a Usagi a amarla locamente, y sin cambiar de expresión facial siquiera. Los secundarios son todos bastante tópicos aunque Mamezo, a pesar de ser el shota de turno, es bastante mono y logra sacarte una sonrisa justo cuando ya has abandonado toda esperanza.
El romance no tiene sentido ninguno: Usagi y Hanzo pasan del odio al amor en menos que canta un gallo y la relación pierde mucho fuelle con el paso de los capítulos. De vez en cuando se introduce a algún rival amoroso para Hanzo, que no tarda en pasar a un segundo plano. El dibujo es anticuado cuanto menos, y sólo hay tres caras que la señora Ueda es capaz de dibujar: chica/chico afeminado, “ikemen” de los 80 y viejete. Buena suerte intentando distinguir luego a la mayoría de personajes.
En conclusión, aquí tenemos un ‘shojo’ clásico y genérico, ideal por si quieres pasar un par de tardes insultando a ninjas de la era Tensho por ser más cortos que el rabo de una boina. ¡Hasta pronto y nos vemos en la próxima review!
No hay comentarios :
Publicar un comentario