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martes, 4 de octubre de 2016

Uta no☆Prince-sama♪ Maji Love Legend Star. Episode 1: Turning Dreams into Music!

Como muchos ya sabréis —o eso esperamos— este pasado domingo 2 de Octubre se estrenó el primer capítulo de la cuarta temporada de Uta no Prince-sama: Uta no☆Prince-sama♪ Maji Love Legend Star. Nosotras, como polillas a la luz, fuimos corriendo a ver nuestra dosis semanal de maromos idol que tanto habíamos echado de menos desde que terminó Uta no☆Prince-sama♪ Maji Love Revolutions. ¡Y para conmemorarlo queremos, de forma semanas, comentar con vosotros nuestras impresiones sobre esta nueva temporada! ¡Arriba el telón!



Episode 1: Turning Dreams into Music!
*beware of spoilers*




 Eva: Hoy, al ver UtaPri, temía darle al Play. No estaba preparada, y eso que llevaban meses avisándonos que esto iba a llegar: cuarta temporada, más maromos; asegurándose bien de que no abandonáramos jamás el “Utapri Hell”. Mi cuerpo no estaba listo, y al darle play al capítulo —que me lo he visto a 1080ppp porque soy de naturaleza autodestructiva— he comprobado que, efectivamente, no estaba lista. Nadie podría haberme preparado para lo que se me venía encima.
Empieza la movida con una escena salida de la nada en la que, uno a uno, cada miembro de ST☆RISH, Quartet Night y Heavens rompen la cuarta pared y dicen el nombre de Haruka.

Las puertas del cielo, ahora con rayos láser
Tras eso, el opening y el capítulo en sí. Y ya estaba yo preguntándome a qué coño venían los primeros sesenta segundos de fanservice ikemenil, en el cual dieciocho tíos, uno a uno, me han hecho sentir como una princesa. Pero yo, ingenua de mí, pensé “bueno, eso era una entradilla para meterte en vena a todos los maromos. Ya se han quedado a gusto y no volverá a pasar”. ¡Los cojones! ¡Y es que soy una ingenua que no ha aprendido nada después de tres temporadas de príncipes de la música!

La cosa está en que ha pasado un mes desde el final de la tercera temporada y, después de un flashback de lo que pasó en el concierto para ver quién iba a ser el grupo de apertura para la Triple S, vemos a Haruka despidiéndose de Tomo-chan y esperando a un taxi. Pero el taxi no llega. En su lugar llega…
Tweets hechos desde mi twitter con candadito, el spam lo hago en secreto *lmao*

Y la secuestran. Y… a ver. No os describiré la escena —ya lo he hecho en mi twitter privado y he estado como una hora para comentar una escena de cinco minutos— pero ha sido la LOCURA más INTENSA que he visto en toda mi vida. Cuando creías que la escena no iba a venirse más arriba, iban y se superaban. El secuestro de los Heavens se ha visto superado por los Quartet Night y, luego, esto se ha visto superado por los ST☆RISH. Un auténtico combate de “a ver quién tiene la chorra más grande” con canciones y montones de escenas de otome en los que todo dios ha sobado a Haruka. Ha sido la locura máxima y, a decir verdad, me ha dado un poco de envidia (yo también quiero que Ai juegue al billar conmigo *sobs*).

Talk dirty to me roboboy
Volviendo al argumento, cuando hemos salido del coma tras esa escena a lo Bollywood nos cuentan que, para decidir qué boy band será la ganadora de la batalla de bandas ésta para actuar en la ceremonia de apertura de la Triple S, van a tener que volver a enfrentarse los tres grupos. ¿Y qué pinta nuestra chica trofeo en todo esto? ¡Pues le ha caído el marrón de tener que componer ella solita una canción a cada grupo, totalmente nueva y original! Buena suerte, Nanami-san. Es el precio que te toca pagar por haber estado en brazos de dieciocho maromos en menos de cinco minutos.
La cosa está en que esto está televisado y la gente se vuelve muy loca y ya nos han plantado en la cara el argumento de esta temporada: a Haruka le va a tocar componer una canción para cada grupo y en la season finale vamos a tener una orgía de nuevas canciones y actuaciones en las que la gente se emociona tanto que empiezan a volar metafóricamente por el universo. No sin antes ver, capítulo a capítulo, como Haruka va de mano en mano y nosotros nos deleitamos con escenas de nuestros idols favoritos superando sus cosas y… Lo de siempre, supongo. ¡Pero ya es lo que vengo a buscar, a mí dadme Quartet Night o dadme la muerte!

Al final de esta movida tan loca vemos a Haruka —que hasta ahora solo ha tenido dos expresiones: sorprendida o MUY sorprendida— llamando por teléfono a Tomo-chan y siendo persona. Ambas se ponen a recordar la primera temporada, se dan apoyo mutuo y vemos un montón de imágenes recicladas de cuando ambas iban a la academia Shining. Con un final más light, los ST☆RISH se ponen a recordar, tú te pones a recordar, y con un sentimiento de nostalgia nos plantan un ending super cuco en los morros.
Inuendos por doquier....................

¿Mi impresión personal? Estoy mareada. Muchos ikemen, mucha música y muchos screenshots de Ai Mikaze que me voy a poner de fondo de pantalla en el ordenador. He sentido que han entrado por la puerta grande tras es hiatus: nos han planteado un argumento, conflictos entre grupos, siete tíos nuevecitos recién sacados del horno (o bueno, cuatro, hay tres Heavens que teóricamente ya tenemos vistos), un montón de música y fanservice… ¡No puedo pedirle más a un primer capítulo, la verdad! ¡Espero que llegue el domingo que viene con el hype por las nubes!
Finalmente, tweet-resumen del capítulo de hoy:


 Maya: Cuatro temporadas. Se dice pronto. Utapri lleva cuatro temporadas y cinco años formando parte de mi vida. Aunque prefiera los juegos con diferencia y mis maromos preferidos siempre se vean en desventaja exceptuando a Tokiya en la primera temporada (pero NUNCA les perdonaré que le quitaran el rock a Ranmaru en Revolutions), soy incapaz de dejar pasar la oportunidad de seguir semana a semana este trainwreck lleno de fanservice, ojos de aguacate y sinsentido. ¿Qué serán capaces de hacer esta vez?
Empezamos el capítulo confirmando que Haruka es una mary sue self insert con todos los maromos diciendo su nombre en primer plano (¡incluso los Heavens, aunque nos den igual!) Opening de Mamoru Miyano, que sigue siendo lo mejor de la serie, y comienza la excusa de trama: Haruka hablando con Tomo-chan sobre que tienen que ir a una clasificatoria del Triple S OTRA VEZ. ¿Por qué? Porque los ganadores de la anterior se sintieron caballerosos, ¡y decidieron que repitiesen la competición otra vez! ¿Qué toda la trama de Revolutions giraba sobre Starish y Quartet Night queriendo superarse mutuamente? ¡Qué más dará, hombre, si ya ni se acuerdan de eso!

Reiji perdiendo su dignidad diciendo cosas que no tendría que decir w
Haruka charla con Tomo y hacen un poco de fanservice yuri y luego Tomo se pira, y qué sorpresa se lleva Haruka cuando en vez de un taxi viene a recogerla UNA LIMUSINA HAMMER. Sí señores, empezamos bien. Dentro están los Heavens dispuestos a camelarse a Haruka (aunque no entiendo cómo se han colado todos por ella si cuatro de ellos no deberían ni conocerla personalmente) ahora que por fin se han cambiado de traje y llevan unos chaqués a juego que parecen cosplay de Theo de Persona 3. Declaraciones de amor en cadena, invasión del espacio vital y kadebons aparte, la fiestuqui de los Heavens se ve interrumpida por los Quartet Night que aquí están por la gloria de sus testículos. Metidos dentro de un tráiler, más guapos y más seductores que nunca. Y oye, si Ranmaru me susurrase cosas al oído llevando chaqué no me quejaría.

Estoy llorando de fondo
Pero esto no sería Utapri si no estuvieran los Starish, puros y vestidos de blanco subidos en un jet, aún desesperados por la V de Haruka aunque en tantos años no hayan tenido de conocer a más y mejores chicas. Más declaraciones de amor, se acaba la canción y ¡anda! Ya hemos llegado. Y mira tú por dónde, no sirve de nada porque tienen que hacer OTRA competición, y OTRA vez Haruka tiene que componerlo todo. Más fanservice yuri, más Starish siendo moñas, ending y fin.

Y yo quiero decir una cosa, señores de Broccoli: yo estoy muy emocionada por el Dolce Vita y todo lo que ustedes quieran, pero esto… Esto no está bien. Ni las fans ni los seiyuus ni los personajes nos merecemos esto. Vale que el trainwreck es divertido pero un chiste empieza a cansarte cuando te lo cuentan muchas veces. Vale que Ranmaru y Tokiya me encantan y les quiero con locura pero verlos estar en un segundo plano el 90% del tiempo y fuera del personaje el 10% restante me duele. Pero como sé que no me escuchan yo sólo hago un ruego que salve este anime: que los Quartet Night tengan una canción como Dios manda.

Y que metan todas las escenas con Ranmaru con traje que quieran.

*dreamy sigh*



2 comentarios :

  1. BEST REVIEW EVER
    Mi reacción con el secuestro fue la misma, y a todos los heaven yo les daba una paliza, a mi que me dejen con Ranmaru y los quartet night xDD

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    Respuestas
    1. ¡¡AYYY, GRACIAS!!
      Same, a mí, para cuando vinieran a rescatarme los QN me encontrarían en la limo rodeada de los cuerpos sin sentido de los Heaven y luego me encadenaría en el camión de los Quartet Night para que los Starish no pudieran llevárseme volando x'D

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